¿Los ansiolíticos contienen alcohol? Descubre si se detectan en el etilómetro y sus consecuencias legales

Imagina la siguiente situación: acabas de tomar un ansiolítico recetado por tu médico para controlar la ansiedad y, horas después, te detienen en un control rutinario de alcoholemia. El agente te pide soplar y, para tu sorpresa, el etilómetro marca positivo. La confusión es total: «¿Los ansiolíticos contienen alcohol y se detectan en el etilómetro?» Esta es una pregunta que recibo con frecuencia en mi despacho y que genera gran preocupación entre conductores medicados.

Como abogado especializado en delitos contra la seguridad vial, comprendo perfectamente tu inquietud. En este artículo te explicaré detalladamente si los ansiolíticos pueden dar falsos positivos en controles de alcoholemia, las implicaciones legales que esto conlleva y, lo más importante, cómo proteger tus derechos si te encuentras en esta situación.

La primera duda que debemos aclarar es fundamental: la mayoría de los ansiolíticos no contienen alcohol en su composición. Medicamentos como el diazepam (Valium), alprazolam (Trankimazin), lorazepam (Orfidal) o bromazepam (Lexatin) pertenecen a la familia de las benzodiacepinas y no incluyen etanol entre sus componentes.

Sin embargo, existe un matiz importante: algunos medicamentos ansiolíticos en formato líquido o gotas pueden contener pequeñas cantidades de alcohol como excipiente o conservante. Este porcentaje suele ser mínimo, pero conviene revisarlo en el prospecto o consultarlo con tu farmacéutico.

En mi experiencia defendiendo casos de positivos en controles de alcoholemia, he comprobado que la confusión suele venir por los efectos secundarios de estos fármacos, no por su contenido alcohólico.

La pregunta del millón: ¿puede un ansiolítico hacer que des positivo en un control de alcoholemia? La respuesta es no, los ansiolíticos por sí solos no deberían dar positivo en un etilómetro convencional. Los dispositivos utilizados por las fuerzas de seguridad están diseñados específicamente para detectar moléculas de etanol en el aire espirado, no para identificar benzodiacepinas u otros principios activos de los ansiolíticos.

Sin embargo, existen situaciones que podrían generar confusión:

• Si has consumido un medicamento ansiolítico en formato líquido que contiene alcohol como excipiente y el control se realiza poco después.
• Si has combinado ansiolíticos con una pequeña cantidad de alcohol (incluso dentro de los límites legales), el efecto potenciador puede aumentar significativamente los síntomas de embriaguez.
• Si el etilómetro presenta errores de calibración o funcionamiento.

Lo que sí debes tener en cuenta es que los ansiolíticos pueden provocar síntomas similares a los de la embriaguez (somnolencia, dificultad para hablar con claridad, problemas de coordinación), lo que podría llevar a los agentes a sospechar que has consumido alcohol.

Los ansiolíticos, especialmente las benzodiacepinas, pueden producir efectos secundarios que se asemejan a los del alcohol:

• Somnolencia y disminución del estado de alerta
• Disminución de los reflejos y del tiempo de reacción
• Visión borrosa o doble
• Dificultad para articular palabras
• Falta de coordinación motora

Estos síntomas pueden llevar a los agentes a realizar una valoración subjetiva errónea sobre tu estado, incluso si el etilómetro no marca presencia de alcohol.

El artículo 379.2 del Código Penal establece que será castigado «el que condujere un vehículo de motor o ciclomotor bajo la influencia de drogas tóxicas, estupefacientes, sustancias psicotrópicas o de bebidas alcohólicas».

Aquí encontramos un punto crucial: conducir bajo los efectos de ansiolíticos recetados no constituye por sí mismo un delito, siempre que:

1. El medicamento haya sido prescrito por un médico.
2. Se esté tomando en las dosis recomendadas.
3. No afecte significativamente a la capacidad de conducción.

Sin embargo, si los efectos del ansiolítico comprometen gravemente tu capacidad para conducir con seguridad, podrías enfrentarte a consecuencias legales, no por el medicamento en sí, sino por el riesgo que supone tu conducción.

En mi opinión como abogado especializado en delitos contra la seguridad vial, es fundamental que los conductores que toman ansiolíticos consulten siempre con su médico sobre la compatibilidad del tratamiento con la conducción y respeten escrupulosamente las indicaciones sobre dosificación y tiempos de espera.

Si te encuentras en la situación de dar positivo en un control de alcoholemia mientras estás bajo tratamiento con ansiolíticos, estos son los pasos que debes seguir:

1. Informa inmediatamente a los agentes sobre tu medicación. Menciona específicamente qué ansiolítico tomas, la dosis y cuándo fue la última toma.
2. Solicita una prueba de contraste en un centro sanitario. Tienes derecho a ella según el artículo 796.1.7ª de la Ley de Enjuiciamiento Criminal.
3. No firmes nada que no entiendas completamente y, si es posible, solicita asistencia letrada desde el primer momento.
4. Conserva el envase y la receta médica del ansiolítico como prueba de tu tratamiento.
5. Contacta con un abogado especializado lo antes posible para preparar tu defensa.

Recuerda que un resultado positivo en el etilómetro cuando estás tomando ansiolíticos puede deberse a varios factores, y existen estrategias legales para defender tu caso.

Si te enfrentas a un procedimiento judicial por dar positivo en un control de alcoholemia mientras estabas tomando ansiolíticos, existen varias líneas de defensa que podemos explorar:

• Cuestionar la fiabilidad del etilómetro: Los dispositivos deben estar correctamente calibrados y someterse a verificaciones periódicas. Un error en este sentido puede invalidar la prueba.
• Presentar informes médicos que acrediten tu tratamiento con ansiolíticos y expliquen cómo pueden afectar a tu comportamiento sin implicar consumo de alcohol.
• Solicitar un contraanálisis de sangre que pueda determinar con exactitud la presencia o ausencia de alcohol en tu organismo.
• Analizar posibles irregularidades en el procedimiento de la prueba de alcoholemia, como no respetar los tiempos entre mediciones o no informar adecuadamente de tus derechos.

Lo que he observado en mi trayectoria profesional es que muchos jueces son receptivos a estas defensas cuando se presentan de manera sólida y documentada, especialmente si no hay antecedentes de infracciones similares.

La mejor estrategia siempre es la prevención. Si estás bajo tratamiento con ansiolíticos y necesitas conducir, te recomiendo:

• Consulta siempre con tu médico sobre la compatibilidad del medicamento con la conducción.
• Lee detenidamente el prospecto y presta atención a los símbolos de advertencia sobre conducción.
• Evita completamente el alcohol, incluso en cantidades mínimas, si estás tomando ansiolíticos.
• Lleva siempre contigo la receta médica o un informe que acredite tu tratamiento.
• Considera medios de transporte alternativos durante los primeros días de tratamiento o tras un cambio de dosis.

Aquí viene lo que nadie te cuenta tras un control de alcoholemia: muchos casos podrían evitarse con una simple conversación previa con tu médico sobre cómo afecta tu medicación a la conducción.

En mi despacho especializado en delitos contra la seguridad vial, ofrecemos una defensa integral para casos de positivos en alcoholemia relacionados con el consumo de ansiolíticos:

• Actuamos desde el primer momento, incluso en comisaría o cuartel de la Guardia Civil, para garantizar que se respeten tus derechos.
• Preparamos minuciosamente tu defensa para el juicio rápido, recopilando toda la documentación médica necesaria y analizando posibles irregularidades en el procedimiento.
• Desarrollamos estrategias específicas para cada caso, buscando la absolución o, cuando no es posible, la reducción de la pena y evitar antecedentes penales.
• Te acompañamos durante todo el proceso, explicándote cada paso y las opciones disponibles.

Este paso marca toda la diferencia en tu defensa: contar con un abogado especializado que conozca a fondo tanto la normativa de tráfico como las particularidades médicas de los ansiolíticos.

¿Pueden los ansiolíticos hacer que dé positivo en un control de alcoholemia aunque no haya bebido?

No, los ansiolíticos por sí mismos no contienen alcohol en cantidades suficientes para dar positivo en un etilómetro. Si el resultado es positivo, probablemente se deba a otro factor, como el consumo real de alcohol, un error en el dispositivo o, en casos muy específicos, el uso de medicamentos líquidos con alcohol como excipiente.

¿Qué debo hacer si me paran en un control y estoy tomando ansiolíticos?

Debes informar inmediatamente a los agentes sobre tu medicación, mostrar la receta si la llevas contigo, solicitar una prueba de contraste en un centro médico y, si el resultado es positivo, contactar con un abogado especializado lo antes posible para preparar tu defensa.

¿Es legal conducir mientras tomo ansiolíticos recetados?

Sí, es legal conducir mientras tomas ansiolíticos recetados, siempre que sigas la dosificación prescrita y el medicamento no afecte significativamente a tu capacidad de conducción. Sin embargo, algunos ansiolíticos pueden causar somnolencia y disminución de reflejos, por lo que debes consultar con tu médico y extremar las precauciones, especialmente al inicio del tratamiento.

La relación entre ansiolíticos y controles de alcoholemia genera muchas dudas entre los conductores. Como hemos visto, estos medicamentos no contienen alcohol en cantidades significativas que puedan dar positivo en un etilómetro, pero sus efectos secundarios pueden confundirse con los de la embriaguez.

Si te encuentras en la situación de dar positivo en un control mientras estás bajo tratamiento con ansiolíticos, recuerda que tienes derechos y opciones de defensa. La clave está en actuar rápidamente, informar sobre tu medicación y buscar asesoramiento legal especializado.

En mi despacho entendemos la angustia que genera enfrentarse a una acusación por alcoholemia, especialmente cuando estás siguiendo un tratamiento médico legítimo. No dudes en contactarnos si necesitas orientación profesional para defender tu caso y proteger tus derechos como conductor.