Enfrentarse a un caso de violencia de género donde se alega huida justificada en situaciones de alcoholemia representa uno de los escenarios más complejos que he visto en mi carrera como abogado penalista. Como especialista en delitos contra la seguridad vial, he defendido a numerosas personas que, tras sufrir episodios de violencia, decidieron huir conduciendo bajo los efectos del alcohol, enfrentándose así a una doble problemática legal.
Violencia de género y huida justificada en casos de alcoholemia: el dilema legal
Comprendo perfectamente la angustia que sientes si te encuentras en esta situación. Has huido de una situación de maltrato, pero al hacerlo bajo los efectos del alcohol, ahora enfrentas cargos por conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas. La intersección entre la legítima defensa y el delito contra la seguridad vial genera un conflicto jurídico que requiere una defensa especializada.
En este artículo analizaré las claves para construir una defensa sólida cuando la huida de una situación de violencia de género se complica con un positivo en alcoholemia, las estrategias legales disponibles y cómo podemos ayudarte a enfrentar esta difícil situación.
El estado de necesidad como eximente en casos de alcoholemia vinculados a violencia de género
Cuando una persona huye de un episodio de violencia de género y posteriormente da positivo en un control de alcoholemia, puede aplicarse la figura del estado de necesidad contemplado en el artículo 20.5 del Código Penal. Esta circunstancia podría eximir o atenuar la responsabilidad penal por conducir bajo los efectos del alcohol.
Para que esta defensa prospere, debemos demostrar que:
- Existía un peligro real e inminente para la integridad física o psicológica
- No había otra alternativa razonable que conducir para escapar
- El mal causado (conducir con tasa de alcohol elevada) es menor que el que se trataba de evitar (sufrir violencia)
En mi experiencia defendiendo estos casos, he comprobado que los tribunales cada vez son más sensibles a estas situaciones, especialmente cuando existe documentación previa de maltrato como denuncias anteriores o medidas de protección.
Jurisprudencia favorable en casos de huida justificada con alcoholemia positiva
Los tribunales españoles han ido desarrollando una línea jurisprudencial que reconoce circunstancias donde la conducción bajo los efectos del alcohol puede verse atenuada o incluso eximida cuando concurre una situación de peligro grave. El artículo 379.2 del Código Penal, que tipifica la conducción etílica, debe interpretarse considerando estas circunstancias excepcionales.
Aquí viene lo que nadie te cuenta tras un control de alcoholemia positivo en estas circunstancias: la carga probatoria sobre la situación de violencia recae principalmente en la defensa. Por eso es fundamental recopilar toda evidencia posible del episodio violento que motivó la huida.
Protocolo de actuación tras dar positivo en alcoholemia huyendo de violencia de género
Si te encuentras en esta situación, es crucial seguir estos pasos para fortalecer tu defensa legal:
- Comunica inmediatamente a los agentes que estabas huyendo de una situación de violencia
- Solicita asistencia médica para documentar posibles lesiones
- Pide que conste en el atestado policial el motivo de la conducción
- Contacta con un abogado especializado antes de prestar declaración
- Recopila testigos o pruebas del episodio violento
Este paso marca toda la diferencia en tu defensa: no firmes el acta de alcoholemia sin hacer constar las circunstancias excepcionales que te llevaron a conducir. Los agentes están obligados a recoger estas manifestaciones en el atestado.
La importancia del informe médico-forense en la defensa
Un elemento determinante para acreditar la situación de necesidad es el informe médico que documente lesiones físicas o psicológicas compatibles con violencia de género. Este informe puede ser decisivo para justificar la huida y contrarrestar la acusación por conducir superando la tasa de alcohol permitida.
En mi opinión como abogado especializado en estos casos, es fundamental solicitar un examen médico completo lo antes posible, incluso si las lesiones no son visibles, ya que el estrés postraumático también puede documentarse y servir como evidencia de la situación de peligro.
Estrategias de defensa legal en juicios por alcoholemia vinculados a violencia de género
Cuando nos enfrentamos a un juicio rápido por alcoholemia en estas circunstancias, desarrollamos una estrategia de defensa en varios frentes:
- Cuestionamiento del procedimiento de medición de la tasa de alcohol en sangre
- Acreditación de la situación de violencia previa mediante pruebas documentales y testificales
- Aplicación de la eximente completa o incompleta de estado de necesidad
- Solicitud de informes psicológicos que acrediten el estado emocional
¿Sabías que una mala praxis policial puede anular toda la prueba de alcoholemia? Aspectos como no respetar el tiempo entre mediciones o utilizar etilómetros no calibrados pueden ser determinantes para cuestionar el resultado positivo.
El conflicto entre la retirada de carnet por alcohol y la necesidad de movilidad en casos de violencia
Una de las consecuencias más problemáticas de un positivo en alcoholemia es la posible retirada del permiso de conducir, que puede agravar la situación de vulnerabilidad de la víctima de violencia de género. En estos casos, podemos solicitar medidas cautelares especiales que permitan:
- Mantener el permiso de conducir hasta la celebración del juicio
- Limitar la prohibición a determinadas franjas horarias
- Permitir la conducción por motivos laborales o familiares esenciales
Veamos por qué este detalle puede cambiar el resultado del juicio: demostrar que el vehículo es fundamental para garantizar la seguridad de la víctima puede influir decisivamente en la decisión judicial sobre la retirada del carnet.
Coordinación con medidas de protección por violencia de género
Es esencial coordinar la defensa en el procedimiento por alcoholemia con las medidas de protección derivadas de la denuncia por violencia de género. La existencia de una orden de alejamiento o la inclusión en el sistema VioGén pueden ser elementos que refuercen la justificación de la conducta de huida.
En mi experiencia, los juzgados de violencia sobre la mujer suelen ser receptivos a informar favorablemente en el procedimiento por delito contra la seguridad vial cuando existe un riesgo acreditado.
¿Cómo defendemos tu caso en TopAlcoholemias?
En mi despacho abordamos estos casos complejos con un enfoque integral que combina mi experiencia en delitos contra la seguridad vial con la sensibilidad necesaria en situaciones de violencia de género. Nuestra actuación comienza:
- Desde el primer momento en comisaría, asegurando que se documenten adecuadamente las circunstancias de la huida
- Coordinando la defensa con los procedimientos paralelos de violencia de género
- Preparando minuciosamente el juicio rápido con todas las pruebas que acrediten el estado de necesidad
- Desarrollando estrategias específicas para evitar la retirada del carnet o los antecedentes penales
Cada caso es único y requiere un análisis detallado de las circunstancias concretas. Mi objetivo es siempre conseguir la absolución o, en su defecto, la mínima sanción posible, considerando la situación excepcional que motivó la conducción.
¿Qué consecuencias penales puedo enfrentar por alcoholemia cuando huía de violencia de género?
Si has dado positivo en un control de alcoholemia mientras huías de una situación de violencia, podrías enfrentarte a penas que incluyen multas de 3 a 6 meses, privación del derecho a conducir de 1 a 4 años, e incluso penas de prisión si la tasa superaba determinados límites. Sin embargo, la acreditación del estado de necesidad puede llevar a una absolución o a una importante reducción de estas consecuencias.
El factor determinante será la proporcionalidad entre el riesgo que enfrentabas y el peligro potencial generado por la conducción bajo los efectos del alcohol. Los tribunales valoran especialmente si existían alternativas razonables a la conducción en ese momento crítico.
¿Puedo negarme a realizar la prueba de alcoholemia si estoy huyendo de mi agresor?
Legalmente, negarse a realizar la prueba de alcoholemia constituye un delito de desobediencia grave tipificado en el artículo 383 del Código Penal. Incluso en situaciones de huida por violencia de género, la recomendación es siempre someterse a la prueba y hacer constar las circunstancias excepcionales que motivaron la conducción.
La negativa podría complicar más tu situación legal, añadiendo un delito adicional que difícilmente podría justificarse por el estado de necesidad. Es preferible realizar la prueba y posteriormente articular una defensa basada en las circunstancias excepcionales.
¿Cómo afecta mi historial de denuncias por violencia de género a un juicio por alcoholemia?
Un historial documentado de denuncias previas por violencia de género fortalece significativamente la defensa en un caso de alcoholemia por huida justificada. Estos antecedentes aportan credibilidad a la situación de peligro alegada y pueden ser determinantes para que el tribunal aprecie el estado de necesidad.
Es fundamental que tu abogado solicite la incorporación de estos expedientes al procedimiento por alcoholemia, estableciendo una conexión clara entre ambas situaciones. Los informes de valoración de riesgo, medidas de protección previas o sentencias condenatorias contra el agresor son elementos probatorios de gran valor.
Conclusión: La defensa integral en casos de violencia de género y alcoholemia
La intersección entre violencia de género y huida justificada en casos de alcoholemia requiere una defensa legal especializada que comprenda ambas dimensiones del problema. No estamos ante un simple caso de conducción bajo los efectos del alcohol, sino ante una situación excepcional donde la persona actuó motivada por un peligro real e inminente.
Si te encuentras en esta difícil situación, es crucial que busques asesoramiento legal inmediato con profesionales que entiendan la complejidad de estos casos. En mi despacho contamos con la experiencia y sensibilidad necesarias para construir una defensa sólida que proteja tus derechos y reconozca las circunstancias excepcionales que motivaron tu conducta.
Recuerda que cada caso es único y que existen alternativas legales para enfrentar esta situación. No dudes en contactarnos para una valoración personalizada de tu caso.


